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La receta

Otra cosa que no había probado nunca hasta venir a Bilbao, los talos.

El talo es un tipo de pan de origen vasco que se elabora con harina de maíz. Su forma es redonda y plana. Antiguamente los talos formaban parte de la alimentación habitual y se tomaban para acompañar las comidas diarias. Para su elaboración se utiliza una variedad de maiz autóctona del País Vasco, el txakinarto, que está en peligro de extinción. En la actualidad podemos ver un ejemplo de un molino que lucha por su conservación.

Con la expansión del uso del trigo, el talo pasó a un segundo plano y hoy en día sólo se come en puestos que se establecen en las principales fiestas y ferias como por ejemplo en la de Santo Tomás de la que ya os hablé en otra ocasión en la receta de Pandoro.

La primera vez que comí talo- y casi única- no me dijo mucho ya que la masa por sí sola me parece bastante insípida-hasta diría que no le ponen nada de sal-. Ahora que he probado a hacerlos en casa he cambiado de opinión.

Talo con chistorra

Ingredientes:

– 350 g de harina de maíz ( harina amarilla, no Maizena y de la no precocinada)
– 250 ml de agua aprox. tan caliente como aguanten nuestras manos
– 1 pizca de sal

Preparación:

En un cuenco vertemos la harina de maiz.

Añadimos agua mezclada con la sal a medida que sea necesario- la cantidad que indico es aproximada, debéis usar la que admita la harina- hasta conseguir una masa elástica y húmeda- compararía la textura con la de la plastilina, algo así debe quedar-. Dejamos reposar una hora tapada con un paño húmedo. Esta masa al ser sólo con maiz se debe amasar mucho si no es imposible de trabajar.

Para formar los talos me he ayudado de una tablita de madera enharinada con harina de trigo normal.

Hacemos cada talo formando previamente una bolita de masa que aplastamos y estiramos siempre desde el centro hacia afuera con ayuda de los dedos. Queda con forma de tortita.

Calentamos una plancha o sartén. Cuando esté caliente ponemos los talos ya formados y dejamos unos minutos. Estará listo ese lado cuando veamos que le han salido unas burbujitas. Damos la vuelta y terminamos de hacer.

Rellenamos con lo que más nos guste: chistorra, lomo, panceta, morcilla, chorizo….Doblamos por la mitad y comemos caliente.

Nota: Si la primera vez no os salen no desesperéis, la masa de maiz no es fácil de trabajar si no se tiene experiencia con ella. Yo me ayudo, para trabajarla mejor, espolvoreando la mesa de trabajo con harina de trigo normal y amasando siempre mucho antes de formar los talos.